domingo, 26 de junio de 2011

Seguir sumando

Pues el título de la entrada va ha ser el lema que quiero que me acompañe día a día, semana a semana durante la preparación de mi reto de este año.

Si la semana comenzó bien y con buenas sensaciones, no ha podido terminar mejor. Ni siquiera tenía pensado como afrontar la primera semana seria de preparación, y al final he conseguido sumar 50km. Al ser la primera de las semanas y casi sin querer he comenzado con un porcentaje correr/andar de un 45/55% , que en las siguientes semanas pretendo inclinar del lado de correr entorno al 70/30% más o menos.

Las sensaciones son muy buenas, ayudado en gran medida a la liberación mental, y sobre todo al poder empezar a tener continuidad. Esto último se lo debo a mi grandes aliados, Silvia Alvaro y Pablo. GRACIAS CHICOS.

Y ahora el momento moñas, quiero aprovechar la entrada para expresar las sensaciones vividas durante el día de ayer en los momentos en los que pude ayudar anímicamente a mis amigos LOS LOCOS DEL CERRO.
Estoy orgulloso de haberos conocido y de ser participe, aunque muy humildemente, del espíritu que nos mueve, la famosa ya DOBLE A.
No voy a destacar a ninguno por que no sería justo, pero enhorabuena a todos por ser como sois y GRACIAS por hacerme sentir uno más de esta sana LOCURA.

Ale, a seguir sumando.

Continuará...

jueves, 23 de junio de 2011

Ahora SI

Ahora si, que ganas tenía de poder decirlo. Tras unos meses en los que mi cabeza estaba ocupada con otras historias, y una vez "solucionadas" estas, vuelvo a tener la mente despejada para empezar a preparar en serio mi objetivo principal del año, la II Madrid-Segovia.

Superada la fase de preparar el Cross del Telégrafo para ir metiendo caña a las "patas", he conseguido enlazar 3 días, que serán 4 o 5, en una misma semana, poquito pero sumando poco a poco. No lo esperaba ni mucho menos ya que al empezar la semana convaleciente de una gastroenteritis, no sabía cuanto tardaría en recuperar.

Empecé con un paseíto de 8km para probar fuerzas. Quedé con mi compi Carlos en el parking frente al tanatorio. Al llegar grata sorpresa, el gran Javi Murallas sería de la partida. Iniciamos el paseo camino al cementerio de Moral. Nos llevó aproximadamente 45´ llegar, con lo que sumado a los 45´de vuelta a los coches hizo un total de 1h30´de agradable compañía. Y sorprendido ya que no me noté falto de fuerzas en ningún momento.

Ese motivo me animó a aceptar la invitación de Alberto para acompañarle al día siguiente a dar 2 vueltas a la dehesa a ritmo suave. En otras circunstancias no me lo hubiera planteado, pero el chaval afronta el GTP de 110km, y sabía que se lo tendría que tomas con calma. Otro factor importante que me animó fue la hora de quedada, las 18:40h, ideal para ir acostumbrando el cuerpo a los rigores del calor. Algo que tengo en mente preparar a conciencia para evitar sorpresas el 17 de septiembre.

El primer km y medio fue un lujo, se nos unió Pablo Burguillo, imaginaros un tío de casi 100kg acompañado de semejantes CRACKS. Falto la foto. Tras esos 1.500m. dimos una vuelta y tras una corta charla con José Mesón, dimos otra vuelta, en esta coincidimos unos minutos con otro CRACK, Luis Ángel. Terminamos la vuelta en 20´mas los 21´de la primera = 41´y unos 7,2km mas "pa la saca".


Y para el jueves como ya me había adelantado Carlos, una caminata por los alrededores del Puerto del León. A eso de las 9:00h llegábamos al puerto, seguimos la pista que lleva a Abantos para dejar los coches a unos 3km. justo delante de la cancela de acceso para la subida a Cabeza Lijar. El grupo estaba formado por Elena, Mari Carmen, David y Miguel Vallejo, Carlos, Alberto y un servidor.
Cabeza Lijar 1822m.

Comenzamos la subida a Cabeza Lijar (1822m), un sendero precioso rodeado de vegetación y con bloques de granito importantes. Hasta el refugio apenas 1,4km de continua ascensión. Fotos, charlita y tras corta deliberación decidimos alargar un poco ya que los cálculos de Alberto daban unos 3km en lugar del 1,4km que salió realmente.

Corto descenso hasta el Collado de la Mina (1710m) y ascensión por la parte mas "técnica" hasta el Refugio de la Salamanca (1787m). De nuevo fotos y breve charla y bajada por la pedregosa pista hasta el Collado de la Mina. Desde allí siempre por la pista hasta el lugar donde habíamos dejado los coches. Finalmente 1h40´para aproximadamente 6km.
Refugio de la Salamanca 1787m.

Como decía al principio, que ganas tenía de comenzar a darle km al cuerpo, que como no podía ser de otra manera es muy agradecido y no se queja en absoluto, de echo parece que quiere más.

Así que para que no se me enfade he quedado con un vecino y amigo para dar una vueltecita por el monte el viernes por la tarde.

Continuará...

lunes, 13 de junio de 2011

Mi Cross del telégrafo 2011

Al igual que el año pasado, esta es la primera de las pruebas que afronto en este 2011 de cara a la preparación de la II Madrid-Segovia. Al ser una carrera de montaña conlleva entrenar cuestas y patear monte, o lo que es lo mismo unas buenas sesiones de pesas para las patas, pero al aire libre y bastante mas divertido y ameno que un gimnasio.

Cuando empecé a prepararla, a parte del objetivo básico que es terminarla, mis esfuerzos iban destinados a intentar darle un bocado de minutos al tiempo que conseguí en la edición anterior. Pero circunstancias diversas han evitado que en las últimas semanas antes de la celebración del cross no haya podido entrenar lo suficiente, vamos que en tres semanas apenas saque tres o cuatro salidas. Con estos antecedentes decidí tomar la salida con la premisa de llegar a meta y tomármelo como un entrenamiento psicológico y con predisposición a sufrir lo necesario, pero a terminar.

Lo que no tenía previsto era el revoltijo estomacal con el que me encontré justo al bajar del coche en Cercedilla. Ya en el momento escatológico del obligatorio “vaciado” precarrera algo no terminó de convencerme. Eso si, la rutina típica en estos casos fue la habitual y sin novedades. De hecho al sentir ese revoltijo lo achaqué a los típicos nervios que afloran poco antes de afrontar cualquier carrera.

Me dirigí a la zona de salida trotando muy, muy suave para evitar darle alas a ese malestar. El montañero Carlos Arias da la salida y empiezo el trote en las últimas posiciones a lo mío, sin prisa y con calma. Lo primeros repechos y fiel a mi manera de actuar decido hacerlos tranquilo, andando, que ya tendremos tiempos de correr.

Mirando a mí alrededor veo caras que me resultan familiares, compañeros de fatigas del año pasado, tanto de la carrera como del entrenamiento que realizan los chicos del Tierra. Esto me hace pensar que no voy mal. Cosa que unos metros mas adelante constato que no es muy real, empiezo a tener amago de nauseas que terminan en una inevitable perdida de la mitad del desayuno. Lo peor es que la otra mitad se queda en tierra de nadie, vamos que ni sube ni baja, con lo que sin gasolina los músculos no trabajan, y sin músculos a ver como se mueve Chemita.

Los primeros 3km se hacen bastante duros y no consigo encontrar mi ritmo, ni trotando ni caminando. Poco antes de llegar a la incorporación a la pista que lleva a los antiguos campamentos, parece que las molestias desaparecen y enseguida encuentro mi ritmo diesel, pasitos cortos y sin pausas empiezo la recuperar algunas posiciones y a encontrarme bastante bien para lo que podía esperar. Empiezo a disfrutar los pasos por el regato, y aprovechando al máximo los pequeños tramos en los que puedo trotar.

Poco antes de llegar a las praderitas que hay 500m. antes de llegar a la estación del Puerto de Navacerrada empiezo a cruzarme con los primeros, que envidia verles bajar a esa velocidad, la caña. Y yo a lo mío poco a poco me presento en las escaleras previas a la parte mas dura de la ascensión. El primer repecho se hace bastante duro por varios motivos, mi falta de entrenamiento, el calor y el hecho de tener que subir por un terreno complicado para evitar molestar a los que bajaban. Respetuoso que es uno.

La parte final hasta el Alto del telégrafo se me hizo mas corta de lo que esperaba, dura eso si, pero más corta de lo que esperaba. Una vez arriba miro el reloj y 1h 23´, algo mas lento que en el 2010 pero bien, lo peor ya ha pasado. Aprovecho para atar algo mas fuerte las Trabucco ya que notaba algo suelto el pie derecho y si ya soy malo bajando si encima me baila el pie ya puede ser tremendo.

La bajada de la pista mejor que el año pasado, un poco de isotónica y un poco de membrillo y a seguir “pa bajo”. Hasta la capilla de la estación fui en compañía de una chica a la que le dije claramente que no me siguiera que seguro que ella bajaba más rápido. Y así fue, enseguida tomó unos 100m de ventaja, que curiosamente no fueron en aumento, pero al no llevar nadie detrás me da más tranquilidad para bajar a mi torpón ritmo.

A diferencia del 2010, sólo me adelantó un corredor más, de echo un conocido vecino de Fernan, al que ya conozco que baja mejor yo. Pasados los kilómetros más técnicos, una vez en la pista el ritmo empieza a ser bastante bueno, y la diferencia con la chica que dejé ir va disminuyendo poco a poco.

Al dejar la pista y coger el estrecho y bonito sendero que sale a la derecha, aprovechando el buen momento anímico decido aumentar un poco el ritmo para probar, y justo al llegar a la zona en la que el terreno mira un poco hacia arriba paso a la chica y me distancio bastante de ella, me siento muy bien para lo que cabía esperar. Eso sí al empezar de nuevo el descenso aflora mi torpeza y aunque paso algunos corredores que van tocados el ritmo de bajada es lento. “Io sono cosi”

Afronto con ganas el último repechito y llego a la meta 2h y 18min después. Creo que 8 minutos peor que el año pasado, bastante contento si pienso en los antecedentes.

Conclusiones: más no se puede hacer entrenando tan poco. De patas creo voy bien, con lo cual si hubiese tenido continuidad en las últimas semanas hubiera sufrido menos y tal vez el objetivo de bajar tiempo lo hubiera logrado. En lo que a coco se refiere también contento, supe dejar de lado el mal arranque y las malas sensaciones para centrarme en hacer lo que me gusta, correr cuando se puede y caminar cuando el terreno así lo pide.

A partir de aquí a intentar ser constante y a empezar a acumular kilómetros, kilómetros y algún que otro kilómetro. Para este año tengo el objetivo para la carrera es aumentar el porcentaje de correr considerablemente, al menos un 60-40 y si se puede más mejor.

En lo psicológico, estoy preparándome para pensar hacer la carrera en solitario, si tengo algún compañero bien, y si no también bien. No voy a despreciar la compañía de nadie ni mucho menos, pero prefiero estar preparado mentalmente ante la posibilidad de no llevar compañero o de quedarme sólo en algún momento.

Lo próximo tal vez Las Cumbres del Escorial, sin olvidar que el objetivo importante de este año es la II Madrid-Segovia.